La revolución turística que ha vivido Canarias se encuentra ahora en una encrucijada

Canarias ha vivido en las últimas décadas una transformación profunda en su modelo económico, pasando de una estructura agrícola y pesquera a depender intensamente del turismo como eje central de su desarrollo. En la actualidad, este sector representa alrededor del 35% del PIB regional y acapara cerca del 40% del empleo de las. En 2024, se registraron unos 18 millones de turistas, quienes dejaron unos 24.000 millones de euros en ingresos.
Retos y desafíos actuales
1. Presión medioambiental y sostenibilidad
- La masificación turística ha deteriorado espacios naturales emblemáticos como el Teide, la Caldera de Taburiente o las dunas de Maspalomas, con erosión de senderos, residuos, daños en la flora y riesgo de incendios.
- Instituciones como WWF alertan de una pérdida de más del 20 % de cobertura vegetal en zonas turísticas durante la última década.
- La capacidad de carga de algunas zonas ya está siendo superada, lo que compromete la calidad de vida de residentes y visitantes.
2. Vivienda y conflicto social
- El crecimiento descontrolado de viviendas vacacionales —con aumentos del 25,7% en establecimientos, cerca de 50.000 y más de 205.000 plazas— está encareciendo el alquiler y generando tensiones sociales A.
- El gobierno ha alcanzado acuerdos con plataformas como Airbnb para retirar anuncios ilegales —157 ya eliminados— y reforzar la regulación mediante una nueva normativa autonómica y la Ley Orgánica 1/2025.
- Movimientos ciudadanas como “Canarias tiene un límite” exigen moratorias turísticas, acceso a vivienda, ecotasa y freno a megaproyectos urbanísticos.
3. Empleo precario y precarización laboral
- A pesar del aumento del empleo —más de 344.000 puestos en 2023 y un incremento del 10,8% respecto a la etapa prepandémica— predominan los contratos temporales, la estacionalidad y salarios bajos.
- Se identifica una fuerte percepción de empleo precario: un 60% de los canarios lo considera así.
- Sindicatos y trabajadores reclaman condiciones más estables, mejor formación y mayor calidad laboral.
4. Sostenibilidad digital y diversificación
- El plan estratégico Canarias Destino 2025-2027 propone una transformación digital con 6,6 millones de euros para herramientas inteligentes, marketplace turístico y sistemas de inteligencia turística.
- Se busca diversificar la oferta hacia turismo cultural, científico, rural o gastronómico, reduciendo la dependencia del sol y playa.
5. Clima, energía e infraestructuras críticas
- El cambio climático amenaza con subir temperaturas hasta 3 °C para finales de siglo, erosionar costas y empeorar las condiciones turísticas.
- Se enfrenta un déficit energético: Canarias necesita cubrir 1.600 MW, para lo cual se proyectan 971 MW hasta 2028 —unos 60% de lo requerido .
- Puertos clave y carreteras demandan electrificación y mejoras urgentes para adaptarse al flujo turístico.
6. Participación ciudadana y percepción social
- Aunque el 76% de la población reconoce el valor económico del turismo, preocupa el encarecimiento del coste de vida (69%), la vivienda (76%) y el deterioro ambiental (60%).
- Los jóvenes (18-34 años) son especialmente críticos, con un 87% considerándolo un factor de encarecimiento de la vivienda.
- Por ello, el eje “Ciudadanía” gana centralidad en el plan estratégico, con mecanismos para fomentar la participación pública, sensibilización y mitigación de impactos.
Hacia una nueva sostenibilidad
Canarias está en una encrucijada: un modelo que ha generado riqueza está alcanzando límites que comprometen el bienestar social y ambiental. La revolución turística actual implica reconocer que el crecimiento desmedido ya no es viable sin transformaciones profundas. El Plan Destino 2025-2027 representa una hoja de ruta que busca integrar sostenibilidad, innovación, recuperación del entorno y justicia social.
La transición hacia un turismo digitalizado, diversificado y responsable es esencial. Sin embargo, los desafíos estructurales como la vivienda, la precariedad laboral, la infraestructura y el cambio climático demandan respuestas urgentes y concertadas, tanto desde la administración como desde la ciudadanía. Solo así Canarias podrá acoger visitantes sin sacrificar su esencia y la calidad de vida de quienes la habitan.