“El diseño no puede ser una acción puntual, sino una inversión a medio y a largo plazo”

Alberto Ochoa – Co-fundador del Estudio Ochoa y Díaz Llanos
En un mundo globalizado como en el que vivimos, las tecnologías de la información permiten a cualquier empresa tener a sus clientes repartidos por todo el planeta. El Estudio Ochoa y Díaz Llanos son un claro ejemplo de que se puede trabajar desde Canarias para empresas extranjeras con los mejores resultados. La firma fundada en el año 2002 por Alberto Ochoa y Ana María Díaz Llanos, diseñó los altavoces de alta gama ‘La Pasión’. Estos aparatos fabricados por la marca hispano-suiza Wadax, se acaban de presentar en Alemania con una buena acogida. CANARIAS EMPRESARIAL ha hablado con Alberto Ochoa de la importancia del diseño en la comercialización de este y de otros productos.
-¿Qué tal ha sido la acogida de este nuevo altavoz Wadax ‘La Pasión’?
“Muy buena. Se presentó en enero en la feria CES 2012 de Las Vegas, y allí la acogida fue bastante positiva. En mayo se ha mostrado en la feria High End 2012 de Alemania, y también allí la recepción ha sido buena”.
-Ustedes habían trabajado antes para Wadax…
“Sí, hicimos el PRE 1, en el año 2009, un preamplificador universal; luego los Speak 1, y Speak 1.5, unos altavoces de alta fidelidad; y ahora los Wadax ‘La Pasión’. Son sistemas de sonidos independientes, equipos de alta fidelidad, diseñados para los que nosotros llamamos “audiófilos”, enamorados de la música que buscan que se reproduzca de la mejor manera posible y disfrutarla en casa”.
-¿Este nuevo altavoz requiere mucho trabajo artesanal?
“Sí, casi 200 horas, no solo de trabajo de artesanía de la madera, también de los ajustes que deben hacer los ingenieros”.
-¿En estos momentos de crisis económica las empresas deben enfocar su producción hacia este tipo de público, de alto poder adquisitivo?
“No es fácil hacerlo, porque necesitas un producto de alta gama, que es complicado de diseñar y requiere una elevada inversión. Además, hace falta tener una red comercial que te permita llegar a esos clientes, y que satisfaga todas sus exigencias. Las personas de alto poder adquisitivo miran mucho en que se gastan su dinero, exigen que la calidad sea muy buena. Este es un nicho de mercado como cualquier otro, pero no es más fácil que otros”.
-¿Tienen previsto hacer algún otro proyecto para Wadax?
“Sí, precisamente en esta feria de Alemania cerramos un acuerdo para un diseño que ya tenemos esbozado, y que presentaremos el año que viene, del que no podemos adelantar nada”.
-Cuando abrieron el estudio en el año 2002, ¿tenían previsto trabajar en aparatos de alta tecnología?
“La verdad es que no. Empezamos diseñando muebles para oficina, pero nunca nos cerramos a ningún campo. Siempre estuvimos abiertos a nuevas experiencias a aprender, sobre todo”.
-Ahora mismo ustedes trabajan por encargo ¿Les ha costado conseguir ese privilegio? ¿Cuál ha sido el método que han seguido para alcanzarlo?
“Originalmente nosotros hacíamos propuestas a los clientes. Contactábamos con ellos, les preguntábamos qué cosas podían necesitar, y asumíamos el coste de hacerles una propuesta. Ahora hacemos pocas propuestas, porque los proyectos por encargo nos consumen mucho tiempo. Otros estudios se dan a conocer a través de los concursos, pero son muy complicados porque suelen ser internacionales y se presentan miles de participantes a cada uno”.
-Ustedes trabajan principalmente para empresas de la Península y el extranjero…
“Sí, por ejemplo Wadax tiene sede en Madrid, pero hay una parte de la producción que se hace en Suiza y otra parte de marketing y ventas que se hace en Estados Unidos”.
-¿Internet, les ha permitido trabajar desde Canarias para empresas que están en todo el mundo?
“Sí, si no sería imposible. Gracias al correo electrónico, Internet, Skype y videoconferencia se puede llevar todo perfectamente. Pero realmente seguimos el mismo método de trabajo que si estuvieramos en Madrid. Las reuniones con los clientes no pueden frenar los proyectos, por eso preferimos intercambiar pareceres a través de correo electrónico y videoconferencia. Si estuviéramos en la Península los clientes nos verían algo más, pero no mucho”.
-No es tan frecuente que los profesionales canarios trabajen desde aquí para empresas extranjeras…
“Sí, y no entiendo por qué. Ninguna empresa de la Península se plantea no dar servicio aquí si resulta rentable. Creo que muchas empresas de aquí no llegan ni siquiera a echar las cuentas de si les compensa o no dar el servicio fuera. Sólo es cuestión de calcular los gastos y el inconveniente de coger un avión alguna vez”.
-¿Tienen algún cliente canario?
“Desde hace dos años nos han ido saliendo clientes aquí. Hace poco hemos presentado una línea de embalaje para Pastelerías Díaz, del que estamos contentos, y seguimos desarrollando cosas nuevas”.
-Pero en general las empresas de las Islas no son demasiado conscientes de la importancia de invertir en innovación y desarrollo…
“Hay algunas empresas que sí, lo que ocurre es que el desarrollo conlleva tiempo, esfuerzo y compromiso. El diseño no puede ser una acción puntual, sino una inversión a medio y largo plazo. Puedes tener un producto muy bueno, pero también necesitas una red comercial, un catálogo, un buen embalaje”.
-¿Cómo se pueden convencer esos empresarios escépticos de la importancia de tener un producto bien diseñado?
“Creo que estamos rodeados de buenos ejemplos. No hay más que ver que las empresas que valen más son las que se vuelcan con el diseño, como Apple u otras de este tipo. Por lo tanto, el diseño funciona, pero a largo plazo. Son como las campañas de publicidad. Un anuncio publicado un día, tiene que ser muy bueno para que reporte beneficios”.
-¿En Canarias no hay muchas empresas dedicadas a la fabricación de muebles ni de objetos de uso doméstico?
“Es curioso que aquí no hay grandes fabricantes de mobiliario, pero sí una tradición muy buena de ebanistas. Quizá habría que plantearse cómo esos artesanos o esas pequeñas empresas podrían abordar otros mercados, en la Península o en el resto de Europa. Porque hoy en día es muy complicado competir en precio con las imitaciones de mobiliario antiguo que viene de Asia”.
-Ustedes están desarrollando el proyecto Objetus, una editora de diseño de series limitadas…
“Es un proyecto al que le tenemos mucho cariño, porque es un vehículo de experimentación. Nos permite estar en contacto con el cliente final, además de colaborar diréctamente con los artesanos, que son quienes fabrican los productos. Hacemos ver a los artesanos que saliéndose de las formas y los materiales tradicionales, hay un mercado, y que las máquinas les pueden ayudar, y no sustituirles. Además, estamos haciendo una tienda online, porque buscamos que la gente compre desde fuera. Si un turista se compra aquí un objeto, y se lo lleva a su país y le gusta a alguien, queremos que ese alguien tenga la posibilidad de comprarlo desde allí. Queremos enfocar el proyecto Objetus a los estudiantes de diseño. Que tengan su primera experiencia profesional con nosotros. ●
