En eMobility Expo se desvela que el año 2027 marcará el punto de inflexión de la electromovilidad en Europa
El periodo entre 2026 y 2027 será la fecha que marque el punto de inflexión en la electromovilidad en Europa. Así lo ha defendido Xavier Pujol, CEO de Reibus, en eMobility Expo World Congress 2024, en la mayor plataforma de negocios integrada y multiespecialista de la industria de la movilidad en Europa que se celebra del 13 al 15 de febrero en Valencia. Pujol ha desvelado las claves de la reducción de costes de los vehículos eléctricos y ha apuntado que, dentro de tres años “será más fácil producir vehículos eléctricos que coches de combustión interna y el tiempo de carga se reducirá fuertemente”. Para China este momento llegará en 2025, mientras que para Estados Unidos habrá que esperar al periodo entre 2030 y 2033, “debido a que les gustan los vehículos grandes y esto conlleva más consumo y baterías más grandes”.
Además, ha apuntado que en vehículos de entre 400 y 500km de autonomía, “veremos aumentar nuestras baterías a 60-70 KW/A en un tiempo de carga del 100% de 5 a 10 minutos, lo que producirá que, en las ciudades, la gente prefiera el vehículo eléctrico como primera opción”. A ello habría que añadir la reducción de costes de las baterías, que considera “posible” reducir entre un 30% y un 50%. “Y en el caso de los motores eléctricos, la reducción del coste será de entre un 20% y un 30%”, señala. Para el futuro próximo, Pujol vaticina que “veremos muchos más materiales reciclados en estos motores eléctricos, así como una reducción de la potencia hasta un rango que sea suficiente para los conductores”.
En este sentido, Inmaculada Domínguez, directora de innovación de Gestamp, ha compartido como la transición de los coches de combustión a los eléctricos exige nuevas arquitecturas para responder a las diferentes dinámicas estructurales y necesidades del mercado.
eMobility Expo World Congress ha puesto también sobre la mesa cómo grandes marcas de automoción están trabajando con nuevas tecnologías basadas en la Inteligencia Artificial, IoT, digital twins o data spaces, entre otros, para impulsar la industria, sobre todo con iniciativas que arrancan desde cero. “Si queremos innovar no hay que pedir, hay que arriesgarse y dedicar los recursos más valiosos que se tienen”, ha mantenido René González, CEO de Alhona.
Asimismo, los expertos han destacado como ventajas del uso de estas tecnologías, la adaptabilidad y la resiliencia, y han recomendado aplicar procesos planificados que permitan los errores como método de crecimiento, pero se consoliden de forma gradual. “No se puede hacer todo el primer día”, ha mantenido Juan Carlos Villanueva, IT Manager de la planta de Vitoria de Mercedes-Benz.
Precisamente, el potencial de los datos y de la conectividad en la industria del vehículo ha sido uno de los asuntos clave en la primera jornada del evento. Laurianne Krid, Director-General en la Fédération Internationale de l’Automobile (FIA) Region I, ha manifestado que conseguir una mayor seguridad ha sido uno de los principales motores del cambio al coche conectado. No obstante, “estamos llegando a una situación de monopolio con Google y Apple y necesitamos innovar en términos de software”.
En este contexto, Camille Barré, directora de transporte y movilidad de la asociación ETRMA, ha enfatizado que “para lograr la digitalización necesitamos compartir los datos entre todos. Al fin y al cabo, todos tenemos los mismos objetivos: sostenibilidad y seguridad”. En esta misma línea, se ha mostrado Benjamin Krieger, secretario general de CLEPA -European Association of Automotive Suppliers-, que ha defendido que “lo que se espera es que haya competencia para bajar los precios, y para conseguirlo hay que abrir el acceso a los datos, necesitamos lograr transparencia y organización de estos datos para incluir a terceros. Por su parte, Adam Owens, de General Motors (GM), ha considerado que la regulación en materia de datos “debe aplicarse de forma inteligente”.
Además, el evento ha mostrado los nuevos vehículos eléctricos de firmas líderes en automoción como Ford, Renault Trucks o Tesla, así como shuttles y autobuses autónomos sin conductor, que se han podido testear en la eMobility Plaza.
Gestión de flotas en vehículos ligeros
eMobility Expo World Congress también ha analizado la transición a la movilidad eléctrica que afronta la gestión de flotas de vehículos ligeros. “A la hora de hacer un traslado de vehículos de combustión a eléctricos debemos valorar un CTO, es decir, el coste total de la transacción, para ver que la inversión nos va a compensar”, ha indicado Carlos Ruiz, director ejecutivo de Iberofleeting.
Este es uno de los desafíos fundamentales, así como “la aceptación de los clientes y el deseo a alquilar estos vehículos”, ha señalado Leticia Lombraña, de Sixt Rent a Car, algo que entronca con el reto de la “labor educativa” entre los consumidores. En esta necesidad, la “del cambio cultural”, coincide con Teresa Romo, de Northgate. “En nuestra compañía lo primero que hemos hecho es que la red comercial viva de primera mano la electromovilidad. Los empleados tenían miedos y ahora son ellos mismos los que están convencidos y son ejemplo de la adaptación. Si quieres hacer un paso, hazlo primero tú mismo”, ha afirmado.
En cuanto a las ventajas de la electrificación, además de contribuir a la descarbonización y poder acceder a zonas limitadas, la principal es que “el consumidor percibe que está apostando por un futuro mejor eligiendo un vehículo eléctrico”, señala Ruiz. No obstante, aún falta por avanzar para contar con una infraestructura sólida que ayude a poder consolidar esta movilidad. “En España tenemos cerca de 27.000 puntos de recarga cuando el parque móvil es de 425.000. La previsión de 2023 era tener 80.000-100.000 puntos de recarga, pero estamos muy lejos”, ha añadido. Aunque el número de cargadores es inferior al planificado, Romo ha abogado por “no dar el mensaje de que debemos esperar a que se desarrolle la red, porque entonces no acabaremos de arrancar nunca”.