Cuando el mundo se pare, invierte en ti, y sé feliz
Por Matías Fonte-Padilla*
Estos primeros meses del 2020 han supuesto el parón en seco de la económica española y de casi todas las actividades empresariales. Lo que nadie imaginó, sucedió. Porque ni siquiera en la crisis del 2007 ni tampoco en crisis anteriores se decidió detener la sociedad.
Para el emprendedor/a, PYMES y grandes empresas este suceso ha sido devastador. Para el Estado ha supuesto detener la máquina de recaudación, pero teniendo que seguir realizando gastos. Para los trabajadores, ha supuesto el despido directo o permanecer en un ERTE de futuro incierto. No solo los emprendedores han tenido que cerrar sus negocios, tampoco han podido seguir saliendo a la calle para tratar de tener nuevas oportunidades.
Las dos preguntas que quiero hacer en este artículo es:
¿Qué vas a poder decir que hiciste durante el confinamiento?, lo cual plantea a que te has dedicado mientras estabas encerrado en tu casa.
La segunda es, ahora que se produce la desescalada y todo el mundo va a comenzar a retomar su vida, hay que plantearse… ¿Te gustaba la vida que tenías antes?
Con respecto a la primera pregunta, lo que has hecho durante el confinamiento, si la respuesta es que has ocupado el tiempo deprimido/a, jugando y/o viendo todas las series y películas del mundo, te digo que ha sido una pena que hayas desperdiciado esta oportunidad.
Sí, oportunidad, has leído bien. La llegada del COV-19 supuso un cambio de nuestras vidas con un parón sin precedentes de la actividad diaria. De lo que siempre carecemos, que es tiempo para nosotros, ahora nos sobra, y tú lo estás desperdiciando. Cuando volvamos al estrés de la normalidad, te verás pensando “si yo tuviera tiempo para…”. Lo tuviste, pero ¿lo aprovechaste?
El tiempo es lo más valioso que poseemos, y muchos lo desperdician siendo consumidores de productos para que pase rápido. Videojuegos, televisión, el móvil con su WhatsApp, las redes sociales, y otras actividades que no nos aportan nada, y que nos roban lo más valioso. Además, muchas tienen publicidad, que te roban todavía más tiempo. Y cuando son gratis, solo tienes que ver algún anuncio, es decir, te siguen robando tiempo. Recuerda, “cuando algo es gratis es que TÚ eres el producto”.
Y encima, hasta tú mismo/a dices que quieres ver algo “para distraerte”. Es decir, prefieres evadirte de tu vida a tomar el control sobre ella y dar los pasos adecuados para disfrutarla al máximo.
La solución para salir de esa apatía es “invertir en ti”, hacer todo aquello que te suma, y quitar todo lo que te resta. Ir convirtiendo tu vida en algo aprovechable, que te haga crecer y ser cada vez mejor y más feliz.
Para hacerlo debes cuidar cuatro aspectos de tu existencia. ¿Cuántas veces te has dicho que “ojalá tenga tiempo para …”? Pues ahora es el momento, no pierdas la oportunidad.
a. Invierte en tu cuerpo. Haz solo aquellas actividades que te mejoren físicamente. Especialmente elimina todo aquello que supone una dependencia y es claramente una droga, como el tabaco, por ejemplo.
Ahora que tienes tiempo aprende a comer mejor, elimina todas esas porquerías que te metes en la boca, que te van destrozando la salud. Eso no significa que no puedas tomarte una copita de vino o una cerveza de vez en cuando, o esa comida tan energética, pero tienes que cambiar tus rutinas. Come despacio, saboreando los alimentos. En resumen, disfruta de tu alimentación.
El ejercicio físico debe formar parte de tu vida como un hábito, a largo plazo. No hace falta que sea nada profesional, ni que te quemes haciéndolo, pero tienes que buscar la forma para que mejores tu forma física al menos tres veces por semana. Duerme las horas correctas, coge sol. Disfruta de tiempo para hacer meditación, o simplemente no hacer nada, descansa de verdad. En resumen, disfruta de tu cuerpo.
b. Invierte en tu mente. Es la oportunidad perfecta para formarse y crecer. Ya sea un idioma, un curso, una carrera, un libro, escribir, pintar, tocar un instrumento musical, etc… Lo importante es invertir tiempo y esfuerzo en mejorar mentalmente. Olvida la tele y los videojuegos. Los nuevos conocimientos o destrezas que aprendas te servirán para crecer intelectualmente. Una persona excelente no deja de formarse en toda su vida. En resumen, disfruta de tu mente.
c. Invierte en tu entorno. Ordena tus papeles, tus armarios, tu cocina, tu trastero, tus archivos de ordenador. Y tira, tira muchas cosas, desecha y pon para reciclar todo aquello que lleva guardado tanto tiempo y que no usas nunca. Si llevan años guardados, ¿para qué lo tienes? También lo puedes poner a vender por redes sociales. Eso sí, si no lo vendes en poco tiempo, o lo regalas o lo tiras. Libera y despeja tus espacios. Decora y mejora tu casa, te sentirás mucho mejor. En resumen, disfruta en mejorar tu entorno.
d. Invierte en tu vida social. Disfruta de verdad con las personas con las que vives, haz actividades con ellos, conócelos mejor. Antes de esta crisis convivías con ellos, pero apenas compartías tiempo de calidad. Es hora de vivir con las personas. También simplifica tus redes sociales, y no pierdas tiempo en tonterías. Desecha todos aquellos contactos de las redes sociales que no te hacen feliz ni te aportan nada. Quédate con la gente que vale la pena para ti. Llámalos y escríbeles. Fortalece tus lazos de amistad y trabajo. Cuando el confinamiento pase, te servirá para afrontar mejor la vuelta a la normalidad. Es decir, disfruta de tus relaciones sociales.
e. Invierte en planificar tu vida. Escribe todo aquello que te gustaría hacer y que no has alcanzado. Decide en que quieres invertir los años de vida que te quedan. No dejes para un futuro incierto lo que quieras realizar. Crea un plan de vida y comienza a ejecutarlo. Aprende como hacerlo, y no dejes pasar la oportunidad de saber hacia donde quieres ir. Vida solo hay una, no la malgastes.
La segunda es ¿Te gustaba la vida que tenías antes? No cabe duda que cada vida es diferente, y que en todas hay aspectos positivos y negativos. Ahora, que tienes tiempo, escribe en un papel lo que te gusta de tu vida normal y lo que no.
¿Qué pasa? ¿Creés que lo que no te gusta no tienes forma de cambiarlo? Pues no es verdad. Todo aquello negativo, todo aquello que nos reste y nos haga sufrir, se le puede impedir el acceso a nuestra vida. ¿Cómo? Con cuatro estrategias.
La primera es decidir que tú quieres ser feliz todos los días, y hacerlo cada vez que te levantas. La segunda es fortalecerte mentalmente para que los problemas y los agravios de los demás no te afecten. Para esto existen múltiples acciones, como sonreír y saludar cuando te insultan. La tercera es hacer solo aquello que te sume y te haga feliz, desechando de tu vida todas las acciones o trabajos negativos. La cuarta es alejar de tu vida todo aquello que sea negativo, incluyendo aquellas personas que te hacen daño. Todos nos merecemos ser felices, a veces podemos hacerlo en contacto directo con otras personas, y a veces tenemos que marcar ciertas distancias. Crea un entorno de relaciones positivo, es fundamental para ser feliz.
Claro que para poder reconstruir tu vida hacia la que realmente quieres, haciendo todas las modificaciones que te he planteado, se tienen que dar tres circunstancias en ti, y que son tan internas que vas a tener que luchar contra ti mismo/a y tus inseguridades.
La primera regla para mejorar tu vida es que CREAS EN TI, solo interiorizando que si eres capaz, y que mereces ser feliz, podrás avanzar. Tú vales mucho, pero a lo mejor nunca lo descubres.
La segunda es que NO TENGAS MIEDO. Los cambios generan incertidumbre, y por eso a veces nos quedamos en nuestra “zona de confort”, aunque nos haga infeliz, porque tenemos miedo a lo que pueda suceder. En realidad, no actuar te hará infeliz, ya actuar siempre será para bien. Cuando hayas hecho un cambio seguramente te preguntarás ¿y por qué no lo hice antes? Esa será la confirmación que vas por el camino correcto.
La tercera es que NO HAY GANANCIA SIN SACRIFICIO. Todo lo que quieras alcanzar no va a llegar del cielo, nada bueno sucederá si te quedas en el sillón viendo la tele, salvo que tu propia vida pasará. Para lograr tener la vida que deseas vas a tener que planificarte e ir realizando acciones todos los días, con unos objetivos claros, e invirtiendo estudio, tiempo, esfuerzo, dinero, etc. El ir consiguiendo pequeñas metas te ayudará a saber que estás avanzando. Será duro, pero la auto-satisfacción será enorme. Saber que estás mejorando no tiene precio.
Las personas, a medida que se vuelven muy mayores, te hablan de que se arrepienten de aquello que no hicieron, aquello que su corazón les decía que tenían que haber hecho. Además dicen que ellos ahora ya no pueden, ni física ni mentalmente, pero que si pudieran lo harían.¿Te va a ocurrir a ti lo mismo?, ¿vas a seguir viviendo una vida que no quieres, en tu trabajo que no te gusta, junto a unas personas que no te aportan, simplemente porque no tienes el valor de tomar las decisiones que sabes debes tomar?, ¿vas a dejar escapar a las personas con las que quieres compartir, dejar de hacer aquello que siempre has querido, perder la oportunidad de trabajar en aquello que realmente te gusta?
Así que ya sabes, este confinamiento debido al COV-19 está siendo la mejor oportunidad de tu vida para mejorarla, no malgastes lo que te ha regalado, lo más preciado, el tiempo.
Cuando esta situación termine, tú no volverás a ser el/la mismo/a, tanto si la aprovechaste para mejorar como si no. Pero si lograste invertir en ti, tu nueva vida será diferente, y tú estarás más preparado/a para afrontar los nuevos retos que te esperan. Crea Tu Futuro y sé feliz en el camino. Será duro, pero será tuyo. Y empieza hoy.