“Soy de los que pienso que el 2021 puede ser un buen año para el turismo en Canarias”

Guillermo José Barreto – CEO de ‘Activity On Canarias’
“Habrá que adaptarse, tendremos un tiempo de incertidumbre, y luego la cosa mejorará. Soy de los que pienso que el 2021 puede ser un buen año para el turismo, aunque dependerá de manera importante de las decisiones que tomen los políticos”. La crisis que la Covid-19 está provocando en el sector turístico canario se solucionará el próximo año, según pronostica a CANARIAS EMPRESARIAL el CEO de ‘Activity On Canarias’, Guillermo José Barreto. Aunque para eso se deberá poner en marcha de forma urgente una serie de medidas: “trabajar los test en origen y en destino, el corredor turístico seguro, exigir responsabilidad a la ciudadanía y seguir los protocolos estrictos”.
-¿Cuál es la situación actual de las empresas turísticas en Canarias?
“Lopesan ha anunciado que cerrará, el día 16, dos hoteles en Gran Canaria, el Abora Catarina y Abora Buenaventura, situados ambos en Playa del Inglés, y el día 28, otros dos hoteles en Fuerteventura, el IFA Altamarena y las IFA Villas Altamarena, porque han tenido una caía de reservas brutales. El 70% que tenían era de turistas alemanes y británicos, por eso deberán cerrar. Al no llegar al 60% de ocupación, no cubren los gastos, y tenerlos abiertos así es una condena.
Aunque yo soy de los que pienso que el 2021 puede ser un año bueno, y lo pienso desde abril de este año. Hay un proceso, un tiempo de adaptación, de incertidumbre, y luego la cosa mejorará. Aunque dependerá de manera importante de las decisiones que tomen los políticos”.
-¿Qué le parece el plan que tiene el Gobierno de Canarias junto a los cabildos, de realizar test a los turistas, a la entrada y a la salida de las islas?
“Ese plan es el que se debió llevar a cabo hace mucho tiempo. Es necesario hacer los test en origen y en destino, para mantener un protocolo estricto de prevención. Lo que yo no entendía es que los representantes de las instituciones dijeran que querían que Canarias fuera un destino turístico seguro, pero no hicieran nada para controlar la entrada y la salida de viajeros, sin saber si estaban contagiados o no. Eso se pidió en su día, pero todo lo que venía del Estado se paró, a pesar de que el Gobierno canario, los cabildos e incluso las patronales de empresarios, querían asumir parte del coste.
La realización de test en origen y en destino, unido a la responsabilidad ciudadana total, lograda a través de una comunicación directa, harán que la situación actual se pueda reconducir. Porque, de nada sirve levantar algo en dos meses para luego perderlo al tercero. Pero, si todas estas medidas que digo, no se ponen en marcha pronto, cuando empiece la contratación de la temporada de invierno, que va a ser dentro de muy poco, nos quedaremos mirando al cielo esperando que vengan los turistas. Ahora se ha conseguido que el Gobierno diga sí, pero hay que poner en marcha todo esto”.
-¿Eso ocurrirá pronto?
“Esa es la cuestión: ¿cuánto tiempo debemos esperar para que llegue ese dinero para poder hacerlo? Nosotros pensamos que todo lo que sea esperar es malo. Es verdad que todo se debe hacer bien, y eso requiere tiempo, pero ya hemos esperado demasiado, y no tenemos tiempo. Necesitamos que ya haya voluntad de hacer las cosas como se deben. No sé si ese dinero vendrá del Estado o de un plan especial de la Unión Europea, lo que sí sé es que debe llegar ya.
En los países donde se decía a los ciudadanos que no vinieran a España y concretamente a Canarias por el peligro del contagio de la Covid-19, los turoperadores han cancelado las reservas de octubre, e incluso las de noviembre y diciembre. Y hay otra cuestión que echa para atrás a los turistas alemanes, británicos, escandinavos… Y es que tendrían que guardar cuarentena cuando regresaran a sus países. Y es eso sobre lo que se está luchando para minimizar”.
-¿Se podrá solucionar?
“Eso son negociaciones políticas entre gobiernos. Se trata de crear un corredor turístico seguro, en el que el test que se hace a la salida de las islas y que confirma que la persona no está contagiada, llegue a su país y no tenga que guardar una cuarentena. Si ese corredor se estructura de forma adecuada y los gobiernos, en origen y en destino, están de acuerdo, pues perfecto.
Otra cosa que estoy viendo y no me está gustando, es el fraccionamiento de las islas en la búsqueda de soluciones. Por ejemplo, la isla de Tenerife, al tener menor número de contagios, se está vendiendo como turismo seguro. Creo que debemos trabajar en conjunto, porque al final, los isleños viajamos entre islas y podemos ser nosotros mismos los que llevemos, sin quererlo, los contagios de una isla a otra.
Todo esto acabará cuando haya un tratamiento o cuando haya una vacuna. Pero para llegar a eso pasará mucho tiempo, por lo que debemos convivir con la enfermedad, y por eso debemos trabajar los test en origen y en destino, el corredor turístico seguro, exigir responsabilidad a la ciudadanía, y seguir los protocolos estrictos, nada más”.
-¿Cuál es la situación de las pequeñas empresas turísticas?
“Es un problema básicamente de recursos económicos. Porque las pequeñas empresas siempre van a rebufo de las grandes. No suelen tener grandes fondos económicos de los que tirar cuando surgen problemas de esta magnitud. Los gastos y los impuestos no paran, pero sí los ingresos, y eso lo que genera son pérdidas.
Los autónomos y los pequeños empresarios tienen además una carga emocional que no está vinculada a la situación de la economía real, y que les impulsa a seguir adelante. Pero eso provoca que se incrementen sus deudas, y de ahí es muy complicado salir. Lo mejor es parar, y luego, más adelante, cuando la situación mejore y si la situación personal de cada uno también es favorable, seguir.
Esta situación nos ha enseñado a nadar y guardar la ropa, quiero decir, a aprender a tener siempre un fondo de reserva, para cuando surjan problemas. Yo sé que en muchos casos se vive al día porque no se reciben tantos beneficios como para ahorrar, o se invierten en capitalizar la empresa para mejorarla, pero también hay que guardar.
En lo que va de año han cerrado muchas pequeñas empresas, pero creo que la crisis económica tal y como entienden los expertos, todavía no ha llegado. Seguimos notando la crisis de la pandemia, que se intenta solucionar con los ‘ertes’, las ayudas, la paga mínima vital, pero la crisis económica todavía no ha llegado. Y el Gobierno del Estado no tendrá recursos para hacerse cargo de todo”.
-Ahora vuelven los cursos de formación para que los empresarios turísticos se reciclen y renueven sus conocimientos…
“Sí, por ejemplo el Patronato de Turismo de Gran Canaria está haciendo muchos cursos formativos relacionados con el turismo, en todos los sectores: actividades de ocio, restauración, hostelería… Son pequeños cursos, incluso píldoras formativas. El nuevo programa de formación de Turismo de Islas Canarias, destinado a profesionales canarios del turismo, permite acceder de manera gratuita a más de 50 cursos de corta y media duración hasta final de año.
El proyecto Anfitriones del Turismo, del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, ha sacado tres cursos sobre los protocolos de seguridad e higiene en empresas contra el Coronavirus SARS-CoV-2.
Me he dado cuenta que muchos trabajadores, cuando los contrata una empresa, dejan de formarse, a no ser que sea una gran empresa que les propone participar y en otras ocasiones es de obligado cumplimiento el asistir a esa formación. Y eso es un error, en este mundo del turismo donde hay tanta competitividad. Yo mismo acabo de terminar un curso de formación superior en Marketing y también la formación del Business English Program Certificate en la Escuela de Negocios Europea de Barcelona (ENEB), con doble titulación expedida por la ENAB, avalada y certificada por la Universidad Isabel I. Y ahora colaboro con la ENEB como Embajador oficial, asesoro en diversos cursos de formación, grados, máster, MBA, de manera global, en todos los idiomas”.
-Del Brexit se ha dejado de hablar, pero sigue siendo un grave problema para Canarias…
«Sí, será una piedra más en el camino. El Reino Unido dejará de pertenecer a la Unión Europea, y ahora la relación con España se va a basar en los acuerdos comerciales entre los dos países. Vamos a depender mucho de esas negociaciones. Cuando estaba en la Unión Europea los acuerdos se decidían allí, y todo era mucho más fácil, pero ahora dejará de ser así».