El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, acompañado por el concejal de Viviendas Municipales (VVMM), Juan José Martínez, además de técnicos de dicha concejalía visitó, el pasado 24 de julio, las obras de rehabilitación que comenzaron ese mismo día, a través del proyecto de Áreas de Renovación y Regeneración Urbana (ARRU) en la plazoleta Gravina, ubicada en el corazón de la barriada de La Victoria.

Este proyecto se enmarca en el Plan Estatal de Vivienda 2018-2021, mediante el Acuerdo de la Comisión Bilateral, y permitirá la mejora de varios bloques que corresponden a 52 viviendas de uno de los espacios más populares de la capital.

El valor de las actuaciones asciende hasta los 475.574 euros, de los cuales casi el 90% irá destinado a rehabilitación y poco más del 10% restante para urbanización. Asimismo, el modo de financiación de las actuaciones implica la aportación por parte del Ministerio de Vivienda del 41,74%; del Gobierno de Canarias con un 30%; Cabildo de Tenerife y Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, el 11,55%, cada una de las instituciones, y las comunidades de propietarios se encargarán de aportar el 5,28% restante.

Para el Ayuntamiento de Santa Cruz es de vital importancia seguir impulsando el área de viviendas, ya que además de mejorar la calidad de vida de los vecinos, actúa como motor generador de empleo en la capital. Por ello el consistorio considera de vital importancia la coordinación entre las diferentes concejalías -en este caso entre Viviendas Municipales y Urbanismo- atendiendo siempre las peticiones de los vecinos del municipio, como ha ocurrido en plaza de Gravina.

La ejecución total de las intervenciones ha supuesto la licitación del proyecto, la adjudicación y redacción del mismo, además de la dirección de las obras, obtención de la licencia y, por último, este último paso de ejecución de la obra.

El estudio encargado de realizar las intervenciones, Makin Molowny, tiene el reto de ejecutar las obras mientras los vecinos siguen ocupando sus lugares de residencia, por lo que deben cumplirse una serie de protocolos, teniendo la precaución necesaria para que la ejecución de los trabajos no afecte a la seguridad de los propietarios de las viviendas.

La mayoría de las obras que se llevan a cabo en los diferentes bloques consisten en la resolución de patologías en cubierta, tratamientos de fachadas, instalaciones exteriores (saneamiento), intervenciones en viviendas y zonas comunes, seguridad y salud, gestión de residuos y urbanización exterior.

El presidente de la Comunidad de Vecinos Gravina, Federico Expósito, que ha estado en contacto directo con el equipo técnico de Viviendas Municipales del Ayuntamiento de Santa Cruz durante los últimos meses, corroboró que los plazos del procedimiento se siguen según lo acordado meses atrás.