El poder de los bancos, gracias a tu dinero y tu estupidez

Por Matías Fonte-Padilla*
¿Son los bancos y demás entidades financieras necesarios? Obviamente todos/as entendemos que la existencia de la banca es importante para la fluidez de la economía, y sus ventajas en tu vida personal y en tu negocio parecen claras.
Te permiten tener todas tus cuentas controladas. Desde tu ordenador o móvil puedes comprobar todos los movimientos, e incluso realizarlos. Puedes domiciliar tus recibos, lo que te facilita el no tener que pagar uno a uno en persona, lo cual actualmente tampoco es posible. Puedes realizar transferencias a otros, ahorrándote el tener que llevar el dinero en persona. Puedes fraccionar pequeños pagos, para que un recibo de alto importe no resulte gravoso. Puedes pagar un recibo aunque no tengas dinero en cuenta, porque el banco te lo puede aceptar. Puedes obtener una tarjeta de débito, con la que pagar en cualquier parte. Incluso puedes tener una tarjeta de crédito, con la que pagar aunque no tengas saldo en cuenta. Y si lo que vas a comprar es muy caro, no te preocupes, siempre puedes pedir un préstamo personal, o incluso hipotecario, con lo que podrás adquirir lo que quieras, incluso tu propia casa. Con un negocio, puedes solicitar pólizas de crédito y trabajar cómodamente con pagarés. Entonces, si es todo tan maravilloso ¿Por qué tenemos tantos problemas con los bancos?
Te voy a ofrecer una serie de principios bancarios que estoy seguro que no les van a gustar a los que trabajan en banca, con tu dinero. Ellos prefieren que sigas siendo ignorante y estúpido.
Primera regla: el único objetivo del banco es ganar dinero. Has oído la frase “la banca siempre gana” asociada a los juegos de mesa, pues aplícala a la gestión bancaria. Los bancos viven de tu dinero, sin él, simplemente no existirían. Ninguna cantidad que ingreses en una cuenta la vas a recibir integra. La mejor forma de salvar tu dinero es no meterlo en una cuenta. Y cuanto más dinero les deposites, más prestamos piden ellos para hacer sus negocios y ganar aún más dinero.
Segunda regla: a la banca le interesa que debas dinero, y que encima lo vayas devolviendo mal. Si no pides dinero, ella no cobra intereses. Si pagas tus deudas a tiempo, ella no cobra intereses de demora. Y además, cuando pides dinero se generan un montón de gastos que ni siquiera esperabas. También, para asegurarse que pagas, tienes que suscribir un seguro de vida, de vivienda, o de lo que haga falta.
Tercera regla: a la banca le interesa que consumas y seas envidioso. Si no consumes, no tienes la necesidad de pagar ni de deber, y eso no le interesa a la banca. Así que te ofrece “casi gratis” todo lo que necesitas para consumir: te llaman ofreciéndote tarjetas, préstamos, electrodomésticos, viajes, etc. Lo importante para ella es que quieras comprar de todo, y si no tienes para pagar, mejor que mejor. Y se alegra cuando vas a la oficina y pides dinero urgente porque lo necesitas. Te lo darán; ahora, imagina los intereses. También la banca se asocia con los comercios para ofrecerte oportunidades realmente “ventajosas” para comprar todo lo que quieras ¿o es que no has visto los créditos a 0% de interés? Es todo mentira.
Cuarta regla: la banca te engaña diciéndote que ahorres para el futuro. Y te ofrecen planes de pensiones, seguros de vida, inversiones a largo plazo, etc. Realmente lo único que quieren es que les deposites tu dinero. En realidad ahorrando nunca se gana dinero a largo plazo, sino que se pierde. Todo lo que te de menos de un 7% de rentabilidad anual, es perder. Si lo guardas en tu colchón solo vas a perder una media del 3% anual, que no está tan mal, y tu dinero lo tienes tú.
Quinta regla: la banca te quiere tener enganchado para siempre, pagando. Si vas a terminar de pagar un préstamo, verás como te llaman para ofrecerte más dinero. Quiere que sigas con ellos hasta que te mueras. Para ello ofrecen plazos muy largos y “cómodos”. Y usan el sistema francés (y sus variantes) para la amortización, de forma que los primeros años todos esos recibos que pagas sólo son intereses. Solo al final del préstamo estarás realmente devolviendo lo que te prestaron. Además, para que aunque te mueras sigas con ellos, te ofrecen cuentas infantiles, para que tus hijos vayan entrando también al sistema.
Sexta regla: la banca juega con tus sentimientos, siempre a su favor. Te han programado para que primero pagues a la banca y después lo que sobre es lo que te quedas tú, es decir, casi nada cada mes. Si no lo hicieras así, te sentirías culpable. Y si dejas de pagar usan la amenaza primero, y la extorsión después, usando unos contratos claramente abusivos pero legales. Te atraen como moscas con promesas de cuentas y servicios sin intereses, y al cabo de pocos meses descubres como te están desangrando. Porque no olvides que:
Séptima regla: el sistema siempre está a favor de la banca en caso de litigio. Tú no eres nadie, y ellos son muy poderosos. Si dejas de pagar te ponen en una lista de morosos y te bloquean el crédito en cualquier lugar, pero, ¿y si son ellos los que no te pagan puedes ponerlos tú en esa lista?
No te dejes engañar, la banca solo quiere convertirte en su esclavo. Tú generas dinero, y ellos lo consumen. Pero si eres inteligente, la usas lo mínimo posible, y no te endeudas sino lo estrictamente necesario, verás como cada mes te aparece dinero que antes no tenías. Simplemente, se queda en cuenta porque te lo han dejado de robar…. Crea Tu Futuro y disfruta del camino. Será duro, pero será tuyo. Y empieza hoy. ●