La economía canaria presenta signos de agotamiento

2019 y 2020 cerrarán con un crecimiento positivo, pero menor que en los últimos años, cuando a final de 2018 se registró un incremento del 2,4% en el PIB, tres décimas menos que un año antes y un punto menos que en 2016. Para este año se estima un avance superior al 2%, pero en 2020 el crecimiento será inferior a esa cifra, aunque mayor que la media europea. Son datos del Informe Anual de la Economía Canaria, presentado por la Confederación Canaria de Empresarios (CCE), el pasado día 25 de junio, en el que se destacan los signos de agotamiento por el moderamiento de la creación de empleo y la debilidad del consumo interior y el sector exterior del Archipiélago.
Entre 2007 y 2016, Gran Canaria se mantiene como la isla más afectada por la recesión. Su PIB solo crece un 0,3% por la fuerte caída de la construcción y la industria. Tenerife, por contra, presenta un avance más favorable en comercio y hostelería, con un crecimiento del 1,1% en su PIB. En general, la provincia oriental acusa más la desaceleración como consecuencia de los síntomas de agotamiento del sector turístico. El pasado año Santa Cruz de Tenerife aumentó su ocupación un 7,2%, frente al 2,6% de Las Palmas. En cualquier caso, los síntomas de desaceleración y la caída de la productividad en un 1,6% no hacen prever una nueva recesión este año ni en el próximo ejercicio. ●